Es una zona del planeta de la que
no paramos de oír hablar. Palestina, Israel, Irak, Siria, Egipto, petróleo,
gas, Irán suníes, chiíes…numerosos países y términos que salen a diario en
nuestros noticiarios. Entender esta zona del mundo es complejo, pues el ser humano
tiende a simplificar y resumir, y hacer esto en este caso es un craso y grave
error. Así que esta será nuestra ambiciosa misión, resumir la situación de
Oriente Medio en 5 pequeñas entradas, sin pedanterías ni intenciones snoob, para todos los públicos. Cómo entender Oriente Medio sin morir en el
intento…
PARTE I (El Estado
Islámico)
La aparición del Estado Islámico en el panorama
internacional ha sido un boom mediático sin precedentes. Este proto-estado ha
removido el panorama geoestratégico de Oriente Medio más de lo que ya estaba,
generando un auténtico avispero repleto de desplazados, muerte y destrucción.
La comprensión del mundo arabo-islámico siempre fue una “asignatura pendiente”
para occidente pues siempre recurrimos a la simplificación para explicar lo que
pasa en esta zona del planeta. Hoy vamos a intentar hacer algo complicado,
vamos a intentar explicar la situación con rigor y exactitud y a la vez de una
manera sencilla y estructurada.
Desde el punto de vista religioso
Oriente Medio no es, ni mucho menos, homogéneo. La mayoría de la población es
musulmana pero además de las divisiones dentro del Islam (entre suníes y chiíes
principalmente), encontramos cristianos (con sus respectivas diferencias
también: católicos, ortodoxos, maronitas…etc.). El Estado Islámico es de
confesión Suní (como la mayoría de Estados de la zona), Irán es Chií, y otros
Estados como Irak (suníes y chiíes) y Líbano (suníes, chiíes y cristianos)
tienen una gran heterogeneidad religiosa. Por tanto desmontamos el primer mito
occidental: Próximo Oriente es un verdadero mosaico religioso.
Si lo analizamos desde el punto
de vista étnico podemos hablar de una mayor “igualdad” entre los diferentes
Estados. La etnia mayoritaria es la árabe, principal en todos los países de la
región salvo en Irán, Turquía e Israel. Esto no quiere decir, pese a todo, que
no encontremos grupos étnicos diferenciados que compliquen aún más la
situación, siendo el más destacable los kurdos, etnia dividida entre Turquía,
Irán, Irak y Siria y que desde hace siglos lucha de manera directa y/o
indirecta con dichos países para conseguir un Estado propio. Turquía es un país
suní pero no árabe (poblado por turcomanos), Irán en un país chií también no
árabe (habitado por persas), e Israel es el único Estado judío del planeta y
está formado por judíos, venidos tras la II Guerra Mundial de diferentes zonas
de Europa (principalmente Europa del Este), y árabes palestinos que se quedaron
tras las injustas ocupaciones israelíes de los territorios de la Autoridad
Nacional Palestina. De este punto
podemos sacar la conclusión de que pese a haber una gran masa árabe en la zona,
hay etnias afincadas en zonas determinadas con una importancia muy destacable.
Una vez más describimos Próximo Oriente como un lugar heterogéneo y por ende
complejo.
Para complicar aún más la
situación debemos comprender las fronteras políticas, es decir, los países que
forman la región. Salvo las excepciones de Irán y Turquía, el resto de países
tienen una escasa, por no decir en algún caso inexistente, identidad nacional.
Todos ellos fueron (la mayoría) creados entre el final de la I Guerra Mundial
(con el infame acuerdo de Sykes-Picot) y el final de la II Guerra Mundial.
Fronteras “rectas” en una región de tan endemoniada complejidad no es, sin
duda, una buena señal. Esa ausencia de identificación nacional está ocupada por
otras dos tendencias: Panarabismo y Panislamismo. El Panarabismo es la unión de todo el mundo árabe (es decir, una unión
étnica), tendencia que tuvo su auge dese los años 50 del siglo pasado en figuras
como las del militar egipcio Gamal Abdel
Nasser. Hoy en día la que está sustituyendo al Panarabismo es el Panislamismo, es decir, la unión de
todos los musulmanes del planeta, algo que representa el Estado Islámico y que
explica por qué numerosos grupos yihadistas de diferentes zonas del mundo han
jurado lealtad al autoproclamado Califa Abu Bakr al Baghdadi, líder político y
religioso del Estado Islámico. Y ahí radica el éxito del Estado Islámico en la
región.
Según afirma Javier Martín en su
libro Estado Islámico: geopolítica del
caos, el Estado Islámico tiene un importante apoyo popular en las zonas que
ocupa, ¿A qué se debería dicho apoyo? ¿Cómo se puede justificar la aceptación
de los líderes de esta barbarie?
Siguiendo los datos que nos
aporta esta obra el Estado Islámico es precisamente eso: un Estado. Posee
burocracia y funcionarios que trabajan para el funcionamiento de la sociedad,
se han abierto escuelas y hospitales, y sus trabajadores reciben una
remuneración económica. Han copiado un modelo que en el mundo árabe-islámico ya
realizó el grupo Chií Hezbollah
(traducido como “Partido de Dios”) en el Líbano.
Durante el verano de 2006 estalló
un conflicto armado entre Israel y la organización terrorista que dejó la zona
sur del Líbano asolada por los bombardeos del Ejército de Israel y la milicia
chií. El Gobierno libanés se vio totalmente superado por la situación y sin
recursos ni motivación para poder reparar los daños que había sufrido la
población, siendo ocupado ese espacio por Hezbollah que pudo costear gran parte
de los daños causados por la guerra (reparación de carreteras, escuelas,
hospitales, reparto de comida a la población civil…etc.). Es este el escenario
parcialmente similar que ha vivido el Irak post-Sadam.
Tras la invasión americana de
2003 y su victoria sobre el régimen Baazista[1]
se desintegró un Estado que funcionaba con una estabilidad y orden social
importante. La minoría suní dirigía el país, pero con el apoyo de una parte
importante de la mayoría chií y otras minorías más residuales como la
cristiana. Sólo la población kurda al noreste del país fue activamente
contraria al régimen y reprimida. Tras la disolución de este régimen el sistema
que funcionaba desde hacía décadas se desmorona: la coalición internacional,
liderada por EEUU, coloca en el poder a dirigentes chiíes (con una gran
desaprobación incluso entre este propio grupo), la minoría suní estalla ante su
pérdida de poder y la resistencia kurda sigue activa.
La población suní del norte del
país pasa a estar desprotegida por un gobierno que ha ejercido la opresión
contra ellos como muestra la inexplicablemente desconocida matanza de Al-Hawiya, donde tras una manifestación suní en contra
del gobierno del chií Nuri Al-Maliki
(en el contexto de las primaveras árabes, el 27 de abril de 2013) milicias
chiíes y el propio ejército iraquí disparan contra la multitud dejando tras de
sí 27 civiles muertos y más de un centenar de heridos. Esto explica que
cantidades ingentes de suníes iraquíes abrazaran la causa, apoyo y aprobación
del yihadismo del Estado Islámico, que se ha convertido en protector de la
minoría suní y por ello la población justifica su barbarie y brutalidad. Aprovechando
el contexto en Siria (guerra civil), su expansión hacía la zona oriental de
dicho país fue sencilla.
Y una vez más la intromisión de una
fuerza exterior en la política interna de una país destroza por décadas la vida
de millones de seres humanos.
En la próxima entrada de este
conjunto de artículos analizaremos el tan complejo y polémico conflicto
árabe-israelí, como siempre de un modo objetivo, serio y sencillo de entender.
Collado Villalba, Madrid, a 8 de Septiembre de 2015.
Manuel Cano Ruiz-Ocaña.
http://www.redaccionpopular.com/articulo/la-masacre-de-al-hawiya-2442013
Este enlace contiene un video donde se muestra de manera relatada los sucesos
de la matanza de Al-Hawiya. Debemos avisar de antemano que son imágenes de gran
dureza y por ello puede dañar la sensibilidad del espectador.
Gran trabajo! Lo que no entiendo aún es por qué los dirigentes chiíes en Irak tienen tan poca popularidad para que los propios chiíes los rechacen.
ResponderEliminarPD: un apunte, creo que en el párrafo del panarabismo/panislamismo hay un par de errores ortográficos ("unión étnica" y "explica por qué")
Gracias por la reseña, los errores ortográficos que has identificado están ya corregidos y subsanados, cosa que agradezco que destacaras.
EliminarLa impopularidad del gobierno chií entre los propios chiíes es en mi opinión debido al acercamiento cultural entre los chiíes iraquies y el mundo revolucionario iraní (claramente anti-occidental). El gobierno de Al-Maliki está colocado "a dedo" por EEUU y eso es algo intolerable para ellos. Pero bueno como te digo es una opinión personal, teorías habrá muchas.
Una vez más gracias.